La impulsividad es cuando reaccionamos de forma inmediata, sin pensar en las consecuencias que pueden tener nuestra acción o palabras. Reaccionamos sin hacer una reflexión previa y esto provoca una reacción desmedida, provocando que luego, en frío sientas arrepentimiento y avergonzado de tus actos.
Este tipo de reacciones suele venir de momentos que tenemos una alta carga emocional, como puede ser de rabia, ira, tristeza o desesperación o también puede ser en situaciones que nos sentimos amenazados o violentados.
Pero hay personas que se sienten que la mayor parte del tiempo actúan de forma impulsiva, sin pensar nunca con las consecuencias negativas que puedan tener y esto los hace cometer muchos errores.
Hoy te quiero contar varias técnicas para controlar la impulsividad:
- Identifica el detonante: El primer paso es hacer una introspección y averiguar cuales son los estímulos o situaciones que te provocan esta conducta impulsiva. Una buena forma para identificar estos detonantes es pensar en esas situaciones y anotar las emociones que sentiste o cuando estés en una situación anotarlo todo. Si somos capaces de identificar el contexto del comportamiento impulsivo mejorará nuestra capacidad para identificar la situación y evitarla o reflexionar antes de actuar.
- Practicar la respiración calmada: La impulsividad comporta que delante de un estímulo reaccionamos, el que queremos es que ante este estímulo poder calmarnos y pensar antes de reaccionar, entonces es importante saber gestionar la respiración, ya que una respiración calmada ayuda a reducir las pulsaciones y nos relaja en los momentos de tensión. La respiración calmada consiste en inspirar durante 4-5 segundos, mantener el aire 3 segundos y expiramos en 4-5 segundos.
- Usa técnicas de relajación: si te sientes incapaz de canalizar tu energía, ya sea positiva o negativa, prueba de realizar ejercicios de relajación, esto te ayudará a controlar la impulsividad y actuar en consecuencia.
- Aprovecha tu energía: Las personas impulsivas suelen tener un exceso de energía que necesita ser liberada y como no es liberada hace que te sientas tenso, provocando que seas más impulsivo. Practicar un deporte o hacer ejercicio físico te ayudará a liberar este exceso de energía y haciéndote sentir más calmado.
- Elabora pautas de actuación: Todos debemos hacernos responsables de nuestros actos y tomar conciencia de los problemas que nos impiden controlar nuestra impulsividad. Por eso te recomiendo que elabores unas pautas de actuación para ciertas situaciones, para las situaciones que te provocan actuar de forma impulsiva. Por ejemplo durante una conversación te empiezas a sentir molesto y tenso desconecta un momento y antes de reaccionar cuenta hasta tres, reflexiona cual será la reacción más adecuada para esa situación o si lo mejor es mantenerte callado.
Si quieres aprender más a cómo gestionar tu impulsividad o quieres un guía para este proceso me puedes contactar conmigo.